A finales del verano de 2009, Desire Treur Zova comenzó a trabajar como voluntario en Fundación Nuestros Jovenes (FNJ), un centro de rescate para adolescentes que habían sido rescatados de la industria del sexo en Ecuador. Durante su tiempo aquí, desarrolló relaciones profundas tanto con las mujeres como con el personal. A medida que su corazón por el ministerio creció, también lo hizo su deseo de involucrar a otros. Invitó a Phil y Debbie Douce, directores de un refugio para niños que viven en la calle, junto con muchos otros, a visitar y ministrar a las niñas. Mientras continuaban visitando a las niñas y haciendo diferentes actividades con ellas, Phil y Debbie sintieron que el Señor les abría el corazón y comenzaron a explorar cómo podrían responder.

En 2012, EsperanzArt fue fundada por Desire y su esposo Miguel, un antiguo niño de la calle que personalmente entendía el dolor de la pobreza y la opresión. Este taller de joyería fue creado para que las mujeres en situaciones vulnerables pudieran tener un ambiente de trabajo seguro y estable donde pudieran ganar salarios justos, mientras que al mismo tiempo desarrollaban relaciones positivas, aprendían más sobre el Señor y se preparaban para trabajos futuros.

Durante ese tiempo, los primeros miembros del equipo de Fin de la Esclavitud Misión Ecuador (FEME) continuaron trabajando como voluntarios en la FNJ y construyendo relaciones profundas con el equipo allí. A través de esta relación, el equipo de FEME fue consciente de la necesidad desesperada de un hogar de ‘siguiente paso’ para niñas que habían pasado por la rehabilitación inicial en el centro de rescate pero no tenían la opción de regresar y vivir con su familia. El equipo comenzó a orar y tomar medidas para trabajar intensamente con mujeres jóvenes de 18-22 años en riesgo de ser víctimas de la trata sexual o que habían sido rescatadas del comercio sexual. Formaron oficialmente un nuevo ministerio y fundación legal llamado Fin de la Esclavitud Misión Ecuador, y el 3 de diciembre de 2013, el equipo abrió Casa Adalia. ‘Adalia’ significa ‘Dios es mi refugio’ en hebreo, y esa era la meta del hogar, ser un lugar seguro para que estas jóvenes mujeres sanen, crezcan y experimenten libertad y propósito.

En 2014, Miguel y Desire comenzaron a visitar el centro histórico de Quito, donde hay muchas personas atrapadas en la pobreza y la industria del sexo. Tenían un corazón para estas personas y querían mostrarles que son vistas, valiosas y amadas por Dios. Cada dos semanas el equipo les visitaba, a hablar, orar y compartir el amor de Dios con ellos. En 2018, este programa de alcances se conoció oficialmente como ‘Amadas.’

En 2015, el equipo reconoció la necesidad de un programa no residencial y comunitario para las mujeres que habían salido de Casa Adalia, así como otras en situación de vulnerabilidad. Se les ofreció el mismo apoyo en su proceso de sanidad interior y crecimiento que en Casa Adalia, pero de una manera diferente, acomodándose a sus necesidades y horarios. En 2018, este programa se conoció oficialmente como
‘Caminos de Libertad.’

FEME continuó con estos cuatro ministerios, hasta diciembre de 2022. Después de mucha oración y conversación, el equipo se dio cuenta de que las necesidades de nuestras mujeres habían cambiado una vez más. La vivienda ya no era la mayor necesidad, por lo que Casa Adalia fue cerrada después de casi diez años de operación. 20 mujeres y 18 niños participaron en el programa mientras sus puertas estaban abiertas. ¡Ellos, y el personal que trabajaba allí, fueron verdaderamente bendecidos a través del refugio seguro que Dios proveyó en la casa!

Desde entonces, el ministerio ha pasado por muchos cambios, incluyendo un nuevo nombre - End Slavery Ecuador (ESE). De acuerdo con las necesidades de nuestras mujeres, hemos ajustado nuestro enfoque principal para empoderarlas y equiparlas para crecer en todas las áreas de su vida y para perseguir metas que las beneficien de manera integral. Esto dio paso a nuestro nuevo programa, ¡el Plan de Desarrollo Personal! Queremos que cada mujer tenga un plan de crecimiento específico para ella, para ayudarla a alcanzar sus metas únicas.

Las necesidades de nuestras mujeres están cambiando constantemente. A lo largo de los años, ESE ha satisfecho estas necesidades a través de diferentes ministerios y programas, con la guía del Señor en cada paso. Nos esforzamos por honrar a Dios y buscar Su voluntad en todo. Este es Su ministerio y confiamos en Él para que nos guíe, provea lo que se necesita y nos sostenga cada día mientras servimos a estas mujeres. Hoy en día, nuestros programas principales son los alcances de Amadas, EsperanzArt y el Plan de Desarrollo Personal. ¡Lea más sobre cada uno de ellos y nuestras otras actividades aquí!